Dado que los síntomas del Lupus asemejan otras enfermedades, son a veces muy vagos, o pueden presentarse y desaparecer, se hace complicado el diagnóstico de Lupus.
Este diagnóstico se hace con una revisión minuciosa de la historia médica completa de los pacientes, complementada con un análisis de los resultados de las pruebas rutinarias de laboratorio y algunos exámenes especializados relacionados al estado inmunológico.
En la actualidad no existe un examen de laboratorio único que pueda determinar si una persona tiene o no Lupus, pero sí existen «algoritmos» que ayudan su diagnóstico: